No os lo he contado, pero el otro día estuve en la presentación de uno de los cortometrajes de mi amigo Enrique García, «Objetivo Violeta». Este proyecto surgió del taller de cine que realizó por encargo de la Federación Provincial de Asociaciones de Mujeres Ágora y donde ha sabido plasmar la realidad de la figura de la mujer en la sociedad actual y el cambio que presentan cuando deciden asociarse o reunirse con otras mujeres.
Cartel del corto Objetivo Violeta. Concha Galán, una de las protagonistas |
Pero además la semana pasada también tuvimos encuentros de emprendedores. Hemos asistido a los talleres que la Escuela Municipal de Emprendedores, a través de la SOPDE, ha organizado y donde hemos hablado de ventas con Jose Antonio Padilla de Hiágora y de Redes Sociales con Miguel Ángel Serralvo. Como siempre nos traemos nuevas herramientas que debemos investigar y utilizar como Sparkol y Powtoon y nuevos contactos de los que seguro en un futuro no muy lejano nos pueden ayudar o ayudar nosotros a ellos. Nos han dado ejemplos de como oficios convencionales y tradicionales gracias a las nuevas tecnologías están sobreviviendo e incluso están abriendo fronteras.
También hemos estado en #futuroesco, evento organizado por Proyecto Lunar, Jon Plaza y Delia Maldonado, y The Translation Factory, Lola Gamboa y Rocío García. En esta jornada nos han hablado sobre cómo emprender en la economía colaborativa. Han asistido nueve ponentes que nos han introducido en el concepto de cultura colaborativa y nos han presentado distintas maneras de emprender y colaborar. Se han tocado temas como de crowdfunding, co-creación, markets, coworking… Por supuesto hemos coincidido con más de un amigo de emprendimiento y nos han hecho reflexionar de como estamos llevando las cosas y como se podrían llevar.
En fin, que creíamos que lo teníamos todo sabido. Que con la universidad y los diez, quince o veinte años de experiencia ya nos podíamos relajar en esto de aprender. ¡Que equivocados estábamos! Nos ha tocado vivir una nueva revolución industrial donde todo lo aprendido y vivido nos sirve para estar más seguros de nosotros mismos pero toca reinventarse. Ha cambiado el modelo productivo, tenemos que empezar de cero y prepararnos para el nuevo mundo que vamos a vivir. Surgen nuevos modelos de negocios, nuevas formas de comunicación, diferentes maneras de conseguir y alcanzar lo que deseamos….Tenemos mucho que aprender.